Cuando un componente mecánico o una estructura está sometida a cargas variables con el tiempo, puede llegar a la fractura, aunque el valor de estas cargas se encuentre por debajo del límite de plasticidad. Este fenómeno se conoce como fatiga, su conocimiento es muy importante ya que un gran número de componentes fallan según este tipo de mecanismos. Por este motivo es necesario conocer el comportamiento de los materiales sometidos a este tipo de solicitaciones.
Existen dos métodos fundamentales para calcular el momento en que se va a producir el fallo por fatiga, y asociados a ellos dos métodos de caracterización:
Curva S-N o curva de Whöler: determina los ciclos totales de vida frente a la tensión alternante.
Curva E-N: determina el número de ciclos hasta la aparición de la grieta frente a la deformación alternante.